Las mujeres mexicanas claman por una mayor seguridad en uno de los países más peligrosos del mundo para ser mujeres, y el vandalismo durante las recientes protestas ha provocado una discusión generalizada sobre la mejor manera de llamar la atención sobre un tema apremiante.
Cientos tienen previsto salir a las calles de la Ciudad de México nuevamente este domingo para exigir justicia para las mujeres que han sido asesinadas, secuestradas y agredidas sexualmente. Serán dirigidas por familiares que hayan perdido seres queridos. Estaba previsto que la jornada comenzara con una obra artística con brillantina en la base de la estatua del Ángel de la Independencia, seguida de una marcha silenciosa en la que se mostrarían imágenes de mujeres y niñas desaparecidas
¿Cómo de serio es el problema?
Las Naciones Unidas dicen que cuatro de cada diez mujeres mexicanas experimentarán violencia sexual, como a tientas o violaciones no deseadas, durante sus vidas, y que nueve son asesinadas en promedio cada día en el país.
Y eso es justo lo que se puede documentar, dice Ramón Ramos, abogado y exviceministro de seguridad pública en la Ciudad de México. "La violencia contra las mujeres es uno de los mayores problemas en México", dice Ramos, quien planea unirse a la marcha del domingo.
Según la organización civil Mexicans United Against Crime, se estima que el 90 % de los delitos no se denuncian en México. Muchas víctimas lo ven como un ejercicio inútil. Resolver delitos es la excepción más que la regla en México, ya que solo uno de cada diez delitos denunciados tienen como consecuencia la cárcel. Durante el 2018 México registró 112 feminicidios -motivados por razones de género- ocupando el primer lugar nacional en este delito, según cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
¿Cómo han reaccionado las mujeres?
Las mujeres mexicanas están hartas, y su ira hierve cada vez más por lo que ven como impunidad para los violadores y asesinos.
Una serie de manifestaciones que denuncian la violencia contra las mujeres ha tenido lugar en todo el país desde los informes en agosto de que las autoridades de la capital ignoraban las acusaciones de que agentes de policía habían violado a dos menores. Las manifestaciones en la capital se conocieron como las protestas de "brillo" después de que las mujeres cubrieran al jefe de policía de la Ciudad de México con un brillo rosado.
En una protesta, docenas de mujeres destrozaron una estación de autobuses de Ciudad de México, desfiguraron el monumento del Ángel de la Independencia con pintura en aerosol y prendieron fuego a una estación de policía durante una protesta en agosto. El daño al monumento enfureció a muchas personas, pero los manifestantes argumentaron que el vandalismo era un medio para exigir acciones en una situación grave, diciendo que un poco de pintura no es nada en comparación con una vida destruida por la violencia. Las autoridades de la ciudad decidieron no presentar cargos por destrucción de propiedad pública.
¿Cómo se sienten las mujeres?
Una encuesta del gobierno de 2018 dijo que el 80 % de las mujeres mexicanas no se sienten seguras. El acoso y la agresión sexual son tan comunes en el transporte público que el metro de la Ciudad de México reserva dos vagones en cada tren exclusivamente para mujeres.
Los expertos culpan a las actitudes machistas sobre los roles de la mujer, combinados con el deterioro de los valores sociales y la violencia generalizada.
Los activistas también dicen que el proceso de denunciar un delito a menudo es doloroso, con largas declaraciones y horas de interrogatorio para los acusadores. Dicen que el proceso judicial está diseñado para culpar a las víctimas. Las mujeres que son agredidas sexualmente pueden ser avergonzadas por haber usado ropa reveladora, mientras que a las mujeres muertas a menudo se las menosprecia tachándolas de juerguistas descuidadas o novias de delincuentes.
Mujeres protestan contra la violencia hacia las mujeres y los feminicidios hoy, viernes 30 de agosto de 2019, en Ecatepec Estado de México (México).
¿Qué han hecho las autoridades?
México ha mejorado su marco legal en las últimas décadas para proteger mejor a las mujeres y las niñas. El congreso aprobó una enmienda constitucional este año que permite la detención preventiva de quienes son acusados de violencia doméstica por segunda vez.
Las sentencias por veredictos de violencia doméstica dependen de la gravedad de las lesiones. Por ejemplo, la imposición de un hematoma o un hueso roto que demora más de 15 días, pero menos de 70 días en sanarse puede ser castigado con una sentencia de seis meses a dos años en la cárcel, mientras que causar lesiones potencialmente mortales podría resultar en hasta ocho años de encarcelamiento.
La violación conlleva una pena mínima de seis años, independientemente de la castidad percibida de una mujer. En 2002, las sentencias de violación variaron en longitud, dependiendo de la supuesta inocencia sexual de una mujer. Las penas por agredir a menores pueden extenderse si el abusador era una persona de confianza, como un maestro o un padrastro.
Desde 2011, los asesinatos de mujeres que portan tintes de odio de género, como la mutilación genital, conllevan una pena mínima de 25 años de prisión, en comparación con 20 años por homicidios regulares.
¿Qué más se puede hacer?
Los activistas querrían que más mujeres se plantaran ante sus abusadores. A menudo, las mujeres retiran las denuncias contra sus esposos y novios, señalan.
Pero Ramos señaló que el mayor problema es que a menudo, las leyes no se aplican. La complacencia e ineptitud de las autoridades fomentan los delitos generalizados porque los agresores no temen sufrir represalias, señaló.
generalizadas porque los autores no temen represalias, dice. "Si uno no respeta la autoridad, es menos probable que respete a una persona vulnerable como una mujer", dice Ramos.
RELACIONADAS:
Mujeres protestan en contra de la violencia en emblemático monumento de México
Futbolistas lanzan una campaña contra la violencia de género en México