La causa que originó el destructivo fuego del norte de California, que ha dejado hasta este domingo al menos 77 muertos, aún está siendo investigada, pero la compañía eléctrica Pacific Gas & Electric (PG&E) ha reportado que detectó un segundo problema en una línea de alta tensión que provocó un apagón el mismo día que se declaró el incendio. Algunos residentes han emprendido acciones legales contra la empresa.
PG&E, la mayor eléctrica de California y la segunda mayor de todo Estados Unidos, ya centraba las miradas desde que la semana pasada reveló a los reguladores que halló un "problema" en una línea de alta tensión cercana al área donde se declaró el incendio solo unos minutos antes de que se iniciasen las llamas, según informa este domingo el diario local The Sacramento Bee.
Según este medio, la compañía presentó un informe de incidentes ante la Comisión de Servicios Públicos de California en la tarde del viernes donde apunta que una línea de alto voltaje, cerca del área rural de Concow en el condado de Butte, sufrió un fallo a las 6:45 a.m. Previamente había informado de otro a unas millas de distancia, cerca de Pulga, que ocurrió a las 6:15 a.m. de esa mañana. Ese incidente inicial ocurrió minutos antes de que los oficiales de Cal Fire recibieran los primeros informes de un incendio forestal en el área de Pulga que se extendería más tarde por Paradise, Concow y Magalia.
Tras este anuncio, el precio de las acciones de la compañía cayeron el pasado miércoles hasta en un 30%, según informa NBC News.
Hasta este domingo por la noche, el bautizado como Camp Fire se ha cobrado la vida de al menos 77 personas mientras que otras 993 están desaparecidas. El fuego ha engullido por completo la localidad de Paradise, de 26.000 habitantes, y ha destruido más de 13.000 edificios. El fuego hasta el domingo está contenido en un 65%.
Los oficiales de bomberos dijeron la semana pasada que están investigando dos sitios donde pudo haber comenzado el incendio, pero no dieron a conocer detalles de estas investigaciones. Sin embargo, PG&E ha reconocido que los bomberos fueron llamados a la escena donde se produjeron estos apagones y los han estado investigando.
En este contexto, los vecinos han iniciado demandas contra la eléctrica. Es el caso de Kirk Trostle y su esposa Patty Garrison, cuya casa de Paradise ha sido destruida en el incendio. Alegan que la empresa de servicios públicos no tomó las medidas de seguridad adecuadas. Un abogado del área de la Bahía también presentó una demanda similar en nombre de otras víctimas.
"Si bien la causa del Camp Fire está aún bajo investigación, si se determina que el equipo de la empresa de servicios públicos es la causa, la empresa podría estar sujeta a una responsabilidad significativa que exceda la cobertura del seguro", dijo la compañía en el documento obtenido por CNBC.