IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Quién es Madeleine Westerhout, "la clave" para llegar a Trump

Esta joven de 27 años es la asistente ejecutiva del presidente Trump, alguien que dispone de una posición privilegiada para garantizar el acceso al inquilino de la Casa Blanca.

“Madeleine es la clave”, ha dicho el propio presidente Donald Trump.

Esta joven de 27 años es nada menos que la asistente ejecutiva del presidente Trump, alguien que muy probablemente haya visto y escuchado demasiado para la poca edad que tiene. Y ahora, según se ha sabido, tiene una posición privilegiada para garantizar el acceso al inquilino de la Casa Blanca.

El nombre de Madeleine Westerhout, quien hasta ahora ha tenido una presencia discreta, ha salido a la luz a raíz de la divulgación de una conversación que se produjo el pasado 14 de agosto entre Trump y el periodista Bob Woodward, autor del polémico libro “Fear: Trump in the White House”.

Mientras escribía su libro, Woodward intentó en al menos seis ocasiones entrevistar al presidente, aunque nunca lo logró. La transcripción de la conversación que ambos mantuvieron luego de que el libro estuviera terminado revela al mandatario quejándose de que ninguno de sus asistentes y confidentes le informó del interés del periodista por hacerle unas preguntas.

Ni la consejera Kellyanne Conway, con quien Woodward almorzó, ni el subsecretario de prensa Raj Shah, ni el influyente senador Lindsey Graham. Nadie le contó al presidente de las intenciones del periodista, de acuerdo con Trump.

“¿Pero hablaste con Madeleine?” -le preguntó Trump a Woodward.

Al recibir un no como respuesta, el mandatario continuó: “Madeleine es la clave. Ella es el secreto. Porque ella es la persona... -y en ese punto Trump divagó o prefirió no dar más información.

Desde entonces todos se preguntan qué hace exactamente la joven Madeleine Westerhout en la Casa Blanca.

La primera vez que Westerhout fue enfocada por los observadores tuvo lugar a finales de 2016, cuando fungía como la “chica que daba la bienvenida” a los dignatarios que visitaban al presidente electo en la Torre Trump de Nueva York. En ese momento, la conocida como “chica del ascensor”, por sus idas y vueltas conduciendo a los invitados, trabajaba como asistente de Katie Walsh, la jefa de gabinete del Comité Nacional Republicano.

Antes, esta joven nacida en Irvine, California y graduada en Ciencias Políticas en 2013 el College of Charleston, en Carolina del Sur, había colaborado con la campaña presidencial de Mitt Romney en 2012, como coordinadora voluntaria del entonces senador estatal de Carolina del Sur John Kuhn, y como becaria con el entonces representante por California John Campbell.

Antes de trabajar a las órdenes de Katie Walsh, la joven se desempeñó también como entrenadora física.

En diciembre de 2016, pocas semanas después del triunfo de Trump en las elecciones y de su designación como miembro a tiempo completo de su equipo de trabajo, Westerhout se manifestaba de esta manera entusiasta en una entrevista con la CNN:

"No lo había planeado, pero ha sido muy divertido y se trata de una experiencia increíble para todos”.

“Es divertido. Estamos listos para llegar a la Casa Blanca”, enfatizó.

De acuerdo con un reporte de The Washington Post, desde que llegó a la Casa Blanca, la influencia de Westerhout no ha hecho más que crecer, cuando otros de sus colegas han salido catapultados y desaparecido de los focos: como Reince Priebus, Sean Spicer o la propia Katie Walsh.

Según el listado más reciente de títulos y sueldos del personal del Ala Oeste de la Casa Blanca, Madeleine Westerhout ganaría unos 130,000 dólares al año, aunque otras fuentes aseguran que se trata de 95.000 dólares.

Además de fungir como “asistente ejecutiva” del presidente, la joven ostenta el título de “asistente especial del presidente”, una designación entre el personal de la Casa Blanca que está por debajo de "asistente del presidente" (Conway es uno de ellos) y “asistente adjunto del presidente” (entre los que se encuentra Raj Shah).

Por lo demás, la cuenta de Twitter de Westerhout nos la muestra como amante de la moda y persona frugal. Además, es fan del equipo de hockey Capitals de Washington, y quien sabe si no lo es también del Príncipe Harry. Esto último a partir de un tuit que escribió el día de la boda real en el Reino Unido: “Meghan Markle vive el sueño de toda niña estadounidense en este momento”.

De manera que esta joven asistente tendrá a partir de esta semana mucho más cuidado con lo que dice y dónde lo dice, pues los medios de prensa y las redes sociales no dejarán que se les escape.

Como posible guardiana de la llave del Despacho Oval, como mediadora de visitas y recados para el presidente, Madeleine Westerhout posiblemente ya haya ocupado las funciones que durante años ocupó Rhona Graff.

En 2017, un confidente del actual mandatario le confesó lo siguiente el portal Politico: “Si quisiera conseguir algo de Trump sin llamar a su teléfono celular, se lo envío a Rhona”.

Ahora la llave la tiene otra persona, y se llama Madeleine.