Walmart anunció el jueves el cierre de 63 tiendas de Sam’s Club en Estados Unidos, horas después de informar que aumentaría los salarios iniciales para los empleados por hora a $ 11 la hora a partir del mes próximo.
En muchos casos, los empleados llegaron al trabajo solo para que les dijeran que su tienda había cerrado. Las tiendas cerradas incluían cuatro en Nueva York y una en Alaska.
Walmart atribuyó la decisión a la necesidad de cumplir mejor con los pedidos en internet, con un crecimiento demográfico menor de lo esperado en algunos mercados y demasiadas tiendas en relación con la demanda en otros.
De las ubicaciones de Sam's Club, alrededor de 50 irán a la quiebra definitiva. Aproximadamente 10 de las 63 están cerrando sus puertas a partir del jueves 11 de enero, mientras que el resto cerrará durante las próximas tres o cuatro semanas.
Se estima que alrededor de 10 a 12 de las tiendas estarán cerradas temporalmente a medida que el minorista las convierta en centros regionales de distribución para ayudar a realizar compras en internet. Los trabajadores empleados anteriormente en esos sitios no tienen garantizada una de las nuevas posiciones.
La noticia de los cierres comenzó a extenderse lentamente el jueves. Los avisos archivados con el Departamento de Desarrollo de la Fuerza Laboral de Indiana revelaron que tres tiendas Sam's Club en el estado cerrarían, mientras que las agencias de noticias comenzaron a informar sobre posibles cierres en ciudades desde Memphis hasta Atlanta y Houston.
La compañía no proporcionó una lista de los lugares específicos que se cerrarán ni la cantidad de empleados que se verían afectados, pero datos examinados por USA TODAY revelaron que al menos 3,802 trabajadores se verán afectados.
Ken Perkins, fundador de la firma de investigación Retail Metrics, sugirió que los cierres de Sam's Club fueron un paso en falso, diciendo: "El cierre de tiendas sin previo aviso es un poco fuera de lugar para Walmart y no la mejor manera de tratar a sus empleados".