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Dos incógnitas refuerzan el misterio alrededor del asesino de Las Vegas

Un cargador de celular y un acceso sin explicación a la suite desde la que realizó la matanza tienen desconcertados a los investigadores

“Aún no tenemos un motivo claro o un por qué, estamos examinándolo literalmente todo”, ha señalado Kevin McMahill, oficial de la policía de Las Vegas, sobre la matanza perpetrada el pasado domingo por Stephen Paddock. Los investigadores han seguido más de un millar de pistas, y han analizado las finanzas, declaraciones políticas, salud mental y otros detalles sobre el autor del tiroteo que acabó con 58 vidas. Dos misterios adicionales tienen confundidos a las autoridades: un cargador de móvil y un acceso sin explicación a la habitación del hotel.

En un momento en el que los registros muestran que el coche de Paddock no estaba en el aparcamiento, alguien usó una de sus llaves para entrar en la suite en el piso 32 del casino Mandalay Bay desde la que horas más tarde llevaría a cabo la matanza. Además, en la habitación se ha hallado un cargador que no se corresponde con los teléfonos celulares del asesino. Hay varias explicaciones posibles, pero aún no está claro cuál es la correcta, según informa MSNBC.

Tras revisar los vídeos del casino, la policía se inclina por pensar que Paddock no contó con un cómplice, según McMahill, pero sigue investigando si alguien estaba al corriente de lo que iba a suceder. Según informa la agencia de noticias Associated Press, se encontraron una serie de números de teléfono en su habitación, y se está analizando si pudo haber contratado a una prostituta en los días que precedieron a la matanza. 

Parece claro que lo planeó todo cuidadosamente: introdujo 23 armas (una docena, manipuladas para convertirlas en ametralladoras) en la habitación del hotel, y colocó cámaras para que le avisaran de la llegada de la policía. Se investiga además si planeaba un atentado con explosivos, tras hallar componentes para fabricar bombas en su coche.

Los registros de la agencia tributaria (IRS) muestran que Paddock no sólo era un jugador habitual sino que además sus apuestas le fueron bien: en 2015 declaró unas ganancias de cinco millones de dólares, en su mayoría de esta manera.  

El vicepresidente, Mike Pence, viajará este sábado a Las Vegas.