IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Juez califica de "inadmisible" la detención prolongada de madres y niños centroamericanos

El juez de inmigración Walter Durling leyó la cartilla al gobierno federal en un documento por la prolongada detención de varias familias centroamericanas, incluyendo un niño de 3 años.

El juez que liberó a una de las familias centroamericanas que estaban detenidas por inmigración desde hace 22 meses, fustigó las acciones del gobierno en un fuerte documento

El juez de inmigración Walter Durling leyó la cartilla al gobierno federal en un documento por la prolongada detención de varias familias centroamericanas, incluyendo un niño de 3 años que, dijo, “ha pasado de los pañales a la cárcel en su corta vida sin comprender nada de la vida afuera”.

Hace dos semanas, Durling ordenó la liberación de “Diego” y de su mamá, detenidos por el gobierno estadounidense desde que los arrestaran en la frontera en noviembre de 2015.

La semana siguiente, otras tres familias confinadas a Berks “family residential center” fueron liberadas por órdenes de Durling y de otros jueces, tras una serie de audiencias que el gobierno estadounidense luchó durante meses para impedir.

Fueron liberados un niño de 8 años (Antonio), un niño de 4 años (Carlos) y un adolescente de 16 (Michael), con sus respectivas mamás. Todos ellos, según sus abogadas, habían estado presos durante 22 meses, bajo el gobierno de Barack Obama y luego, el de Donald Trump.ç

Las cuatro mamás y sus niños forman parte de una demanda presentada por ACLU en noviembre de 2015 en nombre de dos docenas de familias inmigrantes que llegaron a este país de Centroamérica y a quienes se les negó su solicitud de asilo.

El caso alegó que este proceso era defectuoso y pidió una nueva oportunidad para ellos.  Mientras el tema llegó hasta la Corte Suprema, las familias quedaron protegidas contra la deportación, pero el gobierno se negó a liberarlas.

La Corte Suprema se negó a tomar el caso y la mayoría del grupo fue deportado, excepto cuatro menores, que pudieron obtener un Estatus Especial Juvenil, en base al abandono de uno de sus padres (SIJS), lo que les da la oportunidad de obtener la residencia.

“Es inconcebible lo que hizo el gobierno “, dice Juez.

El juez de inmigración que liberó a Diego y a su mamá dijo hace unos días en un documento de tribunal que “es simplemente inconcebible que este niño haya sido detenido más allá de 650 días antes de que DHS lo liberara a él ya su madre, a regañadientes, de acuerdo con la orden de este tribunal”.

“Las razones dadas por el gobierno no se acercan a explicar por qué este niño ha estado bajo custodia durante dos tercios de su vida”, agrega el juez.

Relacionado: Continúan las redadas a indocumentados en todo el país

El disgusto del juez creció aún más, despuésd e que el gobierno decidió apelar las decisiones que liberaron a los pequeños grupos familiares. “Consternación” fue la palabra usada por Durling ante la apelación, con la que ICE intenta volver a encarcelar a Diego, Antonio, Michael y Carlos.

Refiriéndose al caso de Diego, Durling dijo que “el bienestar de Diego no parece tener ninguna importancia, ya que nadie puede argumentar racionalmente que su larga detención sea saludable”.

"Cualquiera que sea la razón por la que el DHS intente perpetuar la custodia de este niño, que nunca fue revelada a este tribunal ni a sus abogados, no puede aceptarse. Y esta corte no tomará parte en ella”, apuntó el juez.

La abogada Carol Anne Donohoe, una del grupo que representa a las “mamás Berks”, dijo que una quinta mamá que no era parte del grupo original  acudirá esta semana ante el juzgado en busca de su libertad.

La joven tiene 20 años y una hija de 4 años y ella misma ha recibido Estatus Especial Juvenil (SIJS), pero no fue puesta en libertad por ICE.

“Ella no fue parte de la demanda, pero el gobierno se negó a liberarla a ella y a su niña de cuatro años”, dijo Donohue. “Ha estado detenida por año y medio”.

En base a cálculos sobre el costo de detención de migrantes, el gobierno ha gastado 1,6 millones de dólares en detener a las cuatro mamás del caso original, junto sus hijos.

Video relacionado: La triste realidad de los niños centroamericanos de camino a EEUU