Como sucede con todos los líderes del mundo, el dictador de Corea del Norte, Kim Jon-Un, se desplaza a todas partes con un séquito de funcionarios, militares y guardaespaldas.
Pero algo sobresale entre esos seguidores, a menudo vestidos de forma casi idéntica. Fotos de la agencia oficial del país, KCNA, muestran a los acompañantes de Kim tomando notas en una libreta mientras lo escuchan. Y no se trata precisamente de periodistas.
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Entonces, ¿quiénes son y por qué lo hacen?
Quienes toman nota son soldados, miembros del partido o funcionarios del gobierno, aclara el profesor James Grayson, experto en Corea de la Universidad de Sheffield. Se supone que presencian en todo momento una demostración del supuesto conocimiento, sabiduría y preocupación del líder.
La toma de notas en realidad tiene que ver más con la imagen que con la presunta erudición del líder, sin embargo:
"Estas son las imágenes que se transmitirá en la televisión y se muestra en los medios de comunicación estatales", señala Grayson en declaraciones a BBC. "Es importante que los aparatchiks que lo rodean se vean pendientes de cada una de sus palabras".
La costumbre fue iniciada por su abuelo Kim Il-sung en los años cincuenta. "Es parte de la imagen del gran líder que ofrece una guía benevolente", dice Grayson.
Según el profesor Steve Tsang, presidente de la Escuela de Estudios Chinos Contemporáneos de la Universidad de Nottingham, los autores de notas escribirán con mucho cuidado. "No querrían escribir nada que fuera, digamos, políticamente inexacto, o estos podría afectarlos".
Como casi todo en el aislado estado asiático, las notas permanecen en secreto.
"Si algo sale de ellas, sería a través del departamento de propaganda, si era lo que realmente se dijo, o es diferente a la orientación dada en ese momento, no importa. Nadie lo cuestionará nunca. Estaban en la fábrica y el consejo que fue lanzado no era exactamente lo que tenías en tu cuaderno - ¿qué vas a hacer al respecto? ", agregó.
Si Kim es como su abuelo las notas podrían contener consejos prácticos. Después de que Kim Il-sung visitó una pesquería en 1976, KCNA publicó que el líder sugirió cambiar la tolva de los camiones para que cargaran mayor peso, algo que se hizo de inmediato.