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Programa migratorio del presidente Donald Trump

La construcción de un muro en la frontera entre México y EEUU, además de una deportación masiva, son algunos de los puntos más relevantes de la política del presidente.

Tras su llegada a la Casa Blanca, el presidente Donald Trump ha centrado sus decisiones y órdenes ejecutivas en el polémico tema de la inmigración y el control de las fronteras de Estados Unidos, asuntos que marcaron sus promesas durante la campaña electoral.

Estas son las principales acciones o asuntos pendientes del plan migratorio del presidente estadounidense hasta el momento.

 

Seguridad de fronteras: Cumpliendo una de las promesas principales de su campaña electoral, firmó una orden ejecutiva para la construcción de un muro a lo largo de la frontera de 3,100 kilómetros con México para impedir el paso a los indocumentados.

"A partir de ahora, se recuperarán sus fronteras", dijo Trump tras firmar el decreto. Dijo que la construcción del muro dijo que comenzaría en meses e insistió en que México pagaría por edificarlo en forma de rembolso, aunque el gobierno mexicano rechazó tajantemente esa opción. El presidente estadounidense ha considerado la posibilidad de gravar con impuestos las remesas y las importaciones mexicanas.  

El costo del muro se calcula en unos $15,000 millones de dólares y los líderes republicanos del Congreso dijeron que aprobarán leyes para otorgar un financiamiento de entre $12,000 y 15,000 millones para construirlo.

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Deportaciones masivas: La orden ejecutiva amplía las prioridades de deportación para incluir no solo a personas recién llegadas por la frontera, convictas de delitos o con órdenes finales de deportación, sino muchas categorías más que podrían terminar por criminalizar virtualmente a cada indocumentado presente en el país, ya sea porque mintió en una solicitud gubernamental o abusó de un programa de beneficios públicos. La Casa Blanca ha insistido que la prioridad siguen siendo los inmigrantes con perfil delictivo.

Más agentes fronterizos: El presidente Trump ordenó por decreto aumentar el personal de vigilancia fronteriza en unos 5,000 agentes, la cantidad de centros de detención de inmigrantes y  los jueces de inmigración.

El incremento de los agentes apunta a crear una fuerza especial de deportación que se concentre en la persecución de inmigrantes criminales, y coopere con las autoridades locales en las redadas contra las pandillas que tengan conexión con indocumentados. También se creará una oficina para atender a los estadounidenses víctimas de delitos por parte de indocumentados.

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Drástico cambio en política de detenciones: Ordenó poner fin a la política de apresar y liberar inmediatamente a los indocumentados, y detener y deportar a todos los inmigrantes capturados entrando ilegalmente por la frontera, manteniéndolos bajo arresto hasta su deportación.

Recortes de fondos a ciudades santuario: Por orden ejecutiva decretó cortar fondos a las llamadas ciudades santuario, que protegían la deportación a los indocumentados. Se suprimirán fondos federales a las ciudades y condados que se nieguen a proporcionar a las autoridades información sobre el estatus migratorio de las personas detenidas.

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Revisión extrema de viajeros de países con terrorismo: Cierre de fronteras y suspensión por 90 días de la entrega de visas a viajeros procedentes de siete países de mayoría musulmana: Yemen, Siria, Sudán, Libia, Somalia, Irak e Irán.

Al firmar la orden ejecutiva, Trump prometió "mantener a los terroristas islámicos radicales fuera de Estados Unidos". La medida establece una inmediata revisión del procedimiento sobre la información necesaria para la adjudicar una visa desde cualquier país. La orden desató de inmediato una ola de protestas en los aeropuertos y acciones legales en los tribunales; una jueza federal emitió una orden de emergencia impidiendo deportar temporalmente a personas procedentes de las naciones vetadas por la orden ejecutiva.

Suspensión del programa de admisión de refugiados: El presidente Trump ordenó la suspensión por 120 días del programa para la entrada de refugiados a Estados Unidos desde cualquier país.  El Secretario de Estado y el Secretario de Seguridad Nacional revisarán el procedimiento vigente para asegurarse que las personas admitidas como refugiados no representen una amenaza a la seguridad y el bienestar de la nación. Para los refugiados de Siria el programa queda cerrado indefinidamente.

Eliminación del programa de visados sin entrevista:  Suspendió el programa especial que permitía a ciertos viajeros, por edad, propósito del viaje y frecuencia en sus visitas Estados Unidos, no tener que someterse a una entrevista para obtener sus visados de no inmigrantes. La medida afecta especialmente a estudiantes universitarios, tripulantes de aviación, empresarios y hombres de negocios y turistas en general.

Dreamers sin decisión inmediata: Aunque en sus planes de campaña Trump anunció que eliminaría el programa DACA, implementados para niños inmigrantes, el destino de los "dreamers" no ha estado entre sus acciones inmediatas.

La acción diferida firmada por el presidente Barack Obama protegía de la deportación a unos 750,000 jóvenes indocumentados, aunque fue rechazada en los tribunales. Hasta ahora Trump ha tranquilizado a los dreamers diciendo que "no deberían estar muy preocupados... Tengo un gran corazón", según expresó en una reciente entrevista, aunque reiteró que eran personas que estaban en el país de manera ilegal. El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spider, indicó que el presidente no adoptaría una orden ejecutiva para eliminar DACA.