Para prevenir el síndrome de muerte súbita, durante los primeros seis meses de vida los bebés deberían dormir en la misma habitación con sus padres, pero no la misma cama, según un nuevo informe de la Academia Americana de Pediatría.
En su nueva guía, la academia recomienda que los niños deben dormir en superficies separadas de sus padres dentro de la misma habitación, como una cuna, pero nunca sobre una superficie blanda como la de los sillones o sofás.
Igualdad de acceso a cambiadores de bebés en EEUU
“Preferiblemente, los bebés deben dormir en la misma habitación que los padres hasta que cumplan un año”, dijo la organización.
Indicó que el objetivo es reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita de lactantes, conocido como SIDS, y otras formas de muerte infantil que pueden ocurrir cuando un bebé está durmiendo, como la asfixia. Estos tipos de muerte entre los niños se conocen colectivamente como las muertes infantiles relacionadas con el sueño, o muertes infantiles repentinas e inesperadas.
El informe presentado durante la conferencia nacional de la AAP en San Francisco, afirma que hay indicios para creer que si los padres comparten la habitación con su bebé se podría reducir el riesgo de muerte súbita hasta en un 50%.
Más recomendaciones para evitar muerte súbitas en bebés
En EEUU cada año hay 3.500 muertes relacionadas a SIDS, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. El 44% de los casos son causados por la muerte súbita del lactante, mientras que el 25% está asociado a estrangulamiento o asfixia accidental. El resto es desconocido.
SIDS se define como las muertes que se producen durante el primer año de vida de un bebé, pero más comúnmente se producen entre la edad de un mes a cuatro meses. El 90% de los casos de SIDS ocurre antes de que un bebé cumpla los seis meses de edad.
El nuevo informe agrega una serie de prácticas y comportamientos de sueño que podría ayudar a proteger a un bebé de SIDS.
Factores que aumentan el riesgo de muerte súbita de bebés
Estos incluyen la colocación de los bebés a dormir boca arriba y colocarlos en una superficie de descanso firme con una sábana ajustada al cuerpo, evitando el uso almohadas y mantas.
No debe haber almohadas, sábanas, mantas u otros elementos que puedan obstruir la respiración del bebé o causar un sobrecalentamiento", dice el informe.