Si estás pensando en sumarte al gran número de personas que lo practican y obtener los beneficios del yoga, entonces te conviene conocer algunos de los diferentes estilos que existen. De esta manera, podrías saber cuál sería mejor para ti. ¡Sigue leyendo!
Bikram yoga. Esta es una forma vigorosa de yoga que se realiza en un estudio con un ambiente caliente que ronda los 105F° (40°C) y con una humedad del 40%. Este sistema está diseñado para aumentar tu ritmo cardiaco, según la Clínica Mayo.
Hatha yoga. Es ideal para principiantes, ya que es una práctica donde se debe mover lenta y suavemente a través de docenas de posturas. Te podría ayudar a estirar y trabajar los músculos, así como a relajarte y disminuir el estrés, según Medicinet.
Iyengar yoga. Es una forma de Hatha yoga, pues utiliza posturas similares. Pero este método se centra más en la alineación del cuerpo y en el equilibrio. Además, se suelen usar accesorios como correas, mantas y bloques durante el ejercicio.
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Kundalini yoga. Aquí los movimientos entre las poses son rápidos y hacen hincapié en la respiración, el canto y la meditación. Tiene una orientación más espiritual que el Hatha y se enfoca en el balance entre la energía y el cuerpo.
Ashtanga yoga. Con esta disciplina podrías aumentar tu fuerza y resistencia. Es un entrenamiento agresivo en el que te tienes que mover rápidamente de una postura a otra. Si quieres un entrenamiento físicamente exigente, este yoga podría ser lo que buscas.
Kripalu yoga. Los movimientos de esta técnica son lentos y apenas llegan a causar sudor. Además, el ejercicio progresa a través de tres niveles de conciencia entre cuerpo y mente, que son cada vez más profundos, según WebMD.
Power yoga. Para hacer este tipo de ejercicio deberías tener una capacidad más atlética. Y es que se basa en una secuencia de posturas del Ashtanga yoga, pero aumentando la fuerza en la parte superior del cuerpo.
Sivananda yoga. Esta técnica es muy suave. Normalmente haces 13 posturas y te acuestas entre cada una. Además, este sistema se puede adaptar a personas que tienen diferentes capacidades físicas.
Viniyoga. Al practicarlo te centrarías más en cómo la respiración pasa a través de tu cuerpo. Es ideal para que la realicen principiantes y personas que quieran enfocarse en la flexibilidad, recuperarse de una lesión, conocer su cuerpo o aprender a relajarse.
Tantra yoga. A través del entrenamiento, la disciplina y los rituales, se trata de vencer los "seis enemigos", que son: deseo, ira, codicia, vanidad, obsesión y celos. Así como las "ocho cadenas", que son: odio, temor, miedo, timidez, hipocresía, orgullo y egoísmo, según el Centro Médico de la Universidad de Maryland.
Bhakti yoga. Esta forma de yoga tiene como objetivo tomar todo el amor que tiene uno como persona y dirigirla hacia lo divino. Al aprender a ver a Dios en toda la creación, el practicante empieza a mostrar respeto por todas las formas de vida y empieza a tratar a los demás con generosidad.
Jnana yoga. Aquí se hace hincapié en la reflexión profunda. Los que practican este método buscan el Jnana o la "sabiduría". El objetivo final es más espiritual, pues se busca ser uno con Dios.
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Karma yoga. Esta técnica se basa en la filosofía de que "las acciones de ayer determinan las circunstancias de hoy". Los practicantes de este yoga comienzan a realizar actos de amabilidad para así mejorar las circunstancias del futuro para sí mismos.
Raja yoga. Este tipo de yoga busca mejorar, más que nada, la mente, la conciencia y el espíritu. Es por eso que los ejercicios se centran en la meditación y no tanto en el ejercicio físico.