Boston, MA.- Cuando llegó hace 16 años a Estados Unidos tratando de conseguir un futuro mejor para su familia, Carmen Torres nunca imaginó que su hija se graduaría de una de las instituciones educativas más prestigiosas del mundo: la Universidad de Harvard.
El jueves esta mexicana indocumentada no podía esconder el orgullo y la emoción que la embargaba porque su hija Norma recibía en esa institución una maestría en relaciones internacionales y política pública.
“Me siento la mujer más feliz del mundo y estoy muy orgullosa de mi hija”, dijo visiblemente emocionada Carmen antes de ingresar a la ceremonia.
Para que su madre pudiera asistir a su graduación, Norma, una joven “soñadora” que se benefició con el DACA, tuvo que realizar un largo recorrido en coche por el miedo de que su madre fuera arrestada por no tener papeles y pudiera correr el riesgo de la deportación.
Por esta razón manejó más de 2,000 millas hasta Houston, Texas.
“Lo último que queríamos era una deportación. Por eso fue manejé a Houston y la traje en carro”, dijo la joven.
Cuando terminó las entrega de diplomas, Carmen buscaba a su hija hasta que finalmente la vio salir de entre la multitud y se fundieron en un emotivo abrazo. La joven de 25 años no podía contener las lágrimas.
“Me siento muy emocionada porque hoy celebramos los méritos y los sacrificios de nuestros padres, porque sin ellos no estuviéramos aquí”, dijo Norma.
Este jueves Carmen cumplió uno de sus principales sueños, ver graduada a su hija. Ahora sólo espera poder solucionar su situación legal en el país.
“Sólo estamos pidiendo un estatus legal para que podamos levantarnos a trabajar sin temor a ser deportados”, concluyó esta orgullosa madre que a punta de esfuerzo, especialmente en trabajos de limpieza, logró que su hija recibiera un título de una de las mejores universidades de mundo.