PARIS (AP) — Autoridades francesas interrogaron el martes a un sospechoso relacionado con los ataques extremistas que aterrorizaron París hace diez días, mientras la capital de Bélgica seguía blindada por cuarto día ante la amenaza de sufrir un ataque similar.
Jawad Bendaoud, la única persona que enfrenta posibles cargos por terrorismo en Francia en relación con los ataques del pasado 13 de noviembre en París compareció el martes por la mañana ante un juez de la capital francesa, dijo una fuente judicial. El hombre fue detenido la semana pasada por proporcionar alojamiento al presunto cerebro de los atentados en un departamento en el suburbio parisino de Saint-Denis.
La policía lanzó un asedio contra la vivienda el 18 de noviembre, en el que fallecieron tres personas — Amdelhamid Abaaoud, el supuesto responsable de los ataques, una mujer que era su prima y otro hombre.
Bendaoud reconoció en una entrevista telefónica haber acogido a dos personas belgas, pero dijo que no sabía quiénes eran ni qué planeaban. El joven, de 29 años, dijo a la televisora BFM: "No sabía que eran terroristas. Me pidieron que hiciera un favor, e hice un favor, señor".
El martes debería ser acusado formalmente o quedar en libertad.
Cuatro personas fueron acusadas de terrorismo en Bélgica desde los ataques de París, que han sido relacionados con una red con vínculos con Francia y Bélgica.
Bruselas mantenía el nivel máximo de alerta el martes, luego de que el primer ministro belga, Charles Michel, hablase de una "grave e inminente amenaza" a la ciudad, que acoge las sedes de la Unión Europea y la OTAN. El centro de crisis belga dijo que el nivel de alerta se modificará solo si se produce un avance significativo.
Las fuertes medidas de seguridad tras los incidentes de París han blindado prácticamente la capital belga, con el metro, muchas tiendas y escuelas cerradas. Michel dijo que a pesar de que el nivel de alerta se mantiene, algunos colegios abrirán sus puertas el miércoles.
Todavía quedan muchas preguntas sin responder, mientras los investigadores intentan reconstruir lo sucedido e identificar a supuestos agresores que podrían seguir huidos.
Por el momento solo se ha identificado a un fugitivo: Salah Abdeslam, que cruzó la frontera a Bélgica la mañana después de los ataques.
Un barrendero de un suburbio de París halló el lunes un cinturón explosivo sin detonar cerca del lugar donde se encontró el celular de Abdeslam, elevando la posibilidad de que abortase su misión, bien por un fallo del dispositivo o por miedo.
Autoridades dijeron que el cinturón, que no tenía detonador, estaba encima de una pila de escombros en Chatillon-Montrouge, justo al sur de París. Un policía dijo que contenía tornillos y el mismo tipo de explosivo utilizado en los que estallaron en los ataques, que se cobraron 130 vidas y dejaron centenares de heridos.