Antes de comprar un smartwatch para nuestros hijos, es necesario pensar en los posibles riesgos que implica.
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En un artículo publicado por PC Magazine, se menciona que el Consejo Noruego del Consumidor descubrió que tres dispositivos de este tipo destinados a niños tenían defectos de seguridad que los hacía fáciles de hackear.
El Consejo Noruego del Consumidor advirtió que los relojes Xplora, Gator 2 y Viksfjord; podrían permitir espiar la ubicación de los menores, escuchar mensajes de voz y extraer información como el nombre o número de teléfono del usuario.
Las pruebas de seguridad las realizó Mnemonic, firma experta en ese tema. Descubrieron que en los modelos Gator 2 y Viksfjord era posible acceder al dispositivo con solo tener el número IMEI, que se encuentra en las cajas y hasta se puede obtener en línea.
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Lo peor viene en el modelo Xplora, que no solo permite espiar a los usuarios, también permite obtener la ubicaciones, nombres y número de teléfono de los contactos.
Mnemonic dijo que las autoridades de protección al consumidor de Europa y Estados Unidos tienen que verificar esos hallazgos de vulnerabilidad porque esos relojes no deben estar en los anaqueles.
Por su parte Monique Goyens, directora de la Organización Europea del Consumidor comentó: “Los padres los compran para proteger a sus hijos. Sin embargo, probablemente desconozcan que en lugar de protegerlos están haciendo que sean más vulnerables”.
Así que ya lo saben papás, hay que tener mucho cuidado al comprar estos dispositivos a los niños, posiblemente lo mejor sea comprarles un reloj tradicional.
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