Un estudio publicado en la revista “Journal of Consumer Psychology” revela que los dibujos animados pueden afectar qué y cómo comen los niños.
Según el estudio, si los muñecos en los dibujos animados son gordos los niños serán más propensos a comer comida chatarra y aumentar de peso.
Los investigadores de la Universidad de Colorado en Boulder estudio dos grupos de niños en octavo grado, 60 en total. El primer grupo vio una foto de un dibujo animado flaco y el otro grupo de uno gordito.
Después de ver las fotos, les ofrecieron Starbursts y chocolatines Hershey a los niños. Según los resultados, el grupo que vio el dibujo animado gordo comieron más caramelo que el primer grupo.
Pero, no te preocupes. Los padres también pueden influir la decisión de sus hijos. Los investigadores repitieron el experimento con 167 niños de una escuela primaria. Después de ver las fotos, le pidieron al primer grupo de niños que piensen en cosas saludables. Al final del experimento, les ofrecieron galletas dulces.
El primer grupo que pensó en cosas saludables comieron menos galletas que el grupo que sólo vio los dibujos y no pensaron en lo saludable.
La conclusión del experimento era que aunque lo que ven en la televisión puede influir a nuestros hijos, es importante hablarles constantemente de hábitos saludables.
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