¿En tu comunidad hay personas sin hogar? Tú y tu familia podrían hacer una diferencia en sus vidas. Te brindamos 5 formas de brindar ayuda, sin necesidad de gastar dinero.
1. Conozcan por qué. Hay más de una razón por la que una persona puede acabar viviendo en las calles, explica Mother Nature Network. Quizás transitó una tragedia personal y no tuvo un sistema de apoyo que lo ayudara a poder mejorar. O tal vez perdió su trabajo, abusó de sustancias peligrosas, tuvo muchas deudas debido a una enfermedad o más razones… Educar a nuestros hijos (¡y a nosotros mismos!) sobre las posibles circunstancias que llevaron a alguien a esta situación actual, es una buena forma de empezar.
2. Demuestren respeto. No traten a una persona sin hogar como si fuese invisible. Recuerden saludarla si pasan cerca, sonreir o conversar si están sentados en el mismo banco de plaza, por ejemplo. Según el mismo portal, muchos homeless dicen que la pérdida de dignidad que acompaña esta situación es más dificil de soportar que la falta de techo o de cosas materiales.
3. Ofrezcan algo de comer. Llevar siempre con ustedes barritas de granola puede ser una buena idea, ya que aportan energía y nutrición. Una botella de agua, también, podría ayudar a prevenir la deshidratación, muy común entre las personas sin hogar.
Otra opción genial es tener a mano gift cards de alguna tienda de comestibles. No solo les estarás dando algo de comer, sino que tendrán una excusa para pasar un buen rato en un sitio reparado, y con una temperatura agradable.
Eso sí: recuerden ofrecer su ayuda antes de brindarla. Aunque muchos estarían agradecidos, otros podrían estar viviendo una situación especialmente dificil y no apreciarían el gesto. Si este es el caso, tan solo sonrían y sigan su camino, sugiere The Bowery Mission.
4. Ayuden en cada estación. El invierno puede resultar especialmente largo si no tienes un sitio seguro y calentito para pasar la noche. ¿Lo bueno? Tu familia puede ayudar a estas personas sin necesidad de gastar.
Para ello, revisen su armario en busca de gorros, guantes, calcetines, bufandas, zapatos y abrigos que no suelen utilizar. Una buena idea es dejarlos a mano junto a la puerta de entrada, y llevarlos de a uno cada vez que salgan, para dárselos a quienes los necesitan más.
Durante los meses más cálidos, ¡también pueden hacerlo! Algo tan simple como una camiseta limpia puede ayudar a cambiar el día de una persona sin hogar.
Otro tip: la próxima vez que vayan a un hotel, recuerden llevarse los frasquitos gratuitos de loción para la piel. Estar tantas horas bajo el sol y al aire libre, podría resecar y dañar la piel de una persona homeless. Ese pequeño frasquito ¡la ayudará más de lo que imaginan!
5. Sean voluntarios. Si tus hijos tienen edad suficiente, podrían ayudar juntos en los refugios. Desde servir comida hasta lavar los platos o cuidar a los niños, hay mucho que se puede hacer.
¿Qué tal aprovechar las cenas en familia para discutir sobre cómo ayudar? Descubre buenas ideas para reunir a todos, en este video.
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