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¿Por qué tu hijo está obsesionado con la tecnología?

Videojuegos, Instagram o Snapchat... Descubre los trucos que usan sus creadores para lograr que tu hijo pase horas frente a la pantalla.

Common Sense Media

¿Tu hijo no quiere apagar su videojuego? ¿Tu hija está obsesionada con los “me gusta” de Instagram? Puede que no sea enteramente su culpa. Al igual que el azúcar de alto octanaje que hay en los helados y esa irresistible sustancia química picante de los nachos picantes, los ingredientes en las redes sociales, videojuegos, aplicaciones y otros productos digitales han sido cuidadosamente diseñados para hacer que vuelvas siempre por más. Aunque los investigadores todavía están tratando de descubrir si los niños (y los padres) pueden ser adictos a la tecnología, algunos científicos informáticos están revelando sus secretos para mantenernos enganchados. 

 

Resistir el impulso de revisar tu teléfono o apagar Netflix después de otro desconcertante episodio de Stranger Things debería ser una simple cuestión de autocontrol. Pero de acuerdo con denunciantes como Tristan Harris, un científico informático que fundó el movimiento Time Well Spent (Tiempo bien invertido), y Adam Alter, autor de "Irresistible: The Rise of Addictive Technology and the Business of Keeping Us Hooked" ("Irresistible: El auge de la tecnología adictiva y el negocio de mantenernos enganchados"), los humanos estamos totalmente dominados.

 

Se ha comprobado científicamente que funciones como las notificaciones de las aplicaciones, la reproducción automática, incluso los "me gusta" y los mensajes que se eliminan automáticamente, nos obligan a mirar/leer/responder en el mismo momento o a sentir que nos estamos perdiendo algo realmente importante (también conocido como FOMO por las siglas en inglés de “fear of missing out”).

 

Detrás de las aplicaciones, los juegos y las redes sociales está todo un grupo de personas cuyo trabajo es hacer que sientas que sus productos son esenciales. Muchas de las técnicas que usan son las delineadas por expertos en comportamiento humano, incluyendo a Nir Eyal, autor de "Hooked: How to Build Habit-Forming Products" ("Enganchado: Cómo crear productos que formen hábitos") y BJ Fogg del Laboratorio de tecnología persuasiva de la Universidad de Stanford.

 

Harris argumenta que estos métodos "secuestran" nuestro propio buen juicio. La mayoría de los adolescentes se preocupan mucho por ser aceptados por sus compañeros, por ejemplo. Por lo tanto, tiene sentido que los comentarios de tus amigos en las redes sociales, tanto los positivos como los negativos, te inquieten hasta que satisfagas tu curiosidad. Tienes un teléfono en el bolsillo, ¿por qué no leerlos ahora? Y ahora. ¿Y ahora?

 

Cada vez más personas de la industria de la tecnología, y entre ellas algunas que diseñaron estas funciones de captación de atención, salen a criticar la manipulación digital e incluso a sugerir formas en que las empresas pueden limitarla. Además, en 2017, una nota interna filtrada de Facebook mostró cómo la red social puede identificar cuándo los adolescentes se sienten "inseguros", "inútiles" y "necesitan un refuerzo de la seguridad en sí mismos". Ese no es un problema que los "me gusta" puedan arreglar.

 

Hasta hace poco, las grandes compañías de tecnología solo defendían sus productos. Facebook, por su parte, dice que sondea a los usuarios diariamente para medir el éxito de sus funciones. Pero cuando las crecientes preocupaciones llevaron a dos accionistas de Apple a pedirle a la compañía que diseñara soluciones para las tecnologías potencialmente adictivas, Apple dijo que sí. Los accionistas también pidieron más investigación sobre el impacto del uso de la tecnología en los usuarios jóvenes. Dichos estudios podrían ayudar a los desarrolladores a crear lo que Tristan Harris denomina productos de "diseño ético" con características integradas que nos inciten a descansar un poco de la tecnología.

 

Ahora hay una manera de combatir esto. Gracias a las personas que están dando a conocer estos métodos, puedes detectar algunos trucos específicos que utilizan y reflexionar sobre cómo afectan tus pensamientos y comportamiento. Recuerda: ellos quieren reducir el tiempo entre tus pensamientos y acciones. Hacer esa pausa te ayudará a resistir tus impulsos. A continuación, presentamos algunas de las funciones clave diseñadas para controlar tus acciones. También hay algunas ideas que tu familia y tú pueden usar para resistir la tentación.

 

 

La reproducción automática

 

Una función que se usa principalmente en Netflix y Facebook, la reproducción automática es la característica que hace que los videos continúen transmitiéndose incluso después de que terminan. Tristan Harris llama a esto el fenómeno del "bol sin fondo". Con un tazón o bol que se llena sin límite, las personas consumen un 73 por ciento más de calorías. O miran compulsivamente demasiadas películas.

 

Qué hacer. La reproducción automática normalmente viene activada de manera predeterminada, por lo que debes desactivarla. Por lo general, esa función se encuentra en la configuración de la cuenta de la aplicación.

 

Las notificaciones

 

Los estudios demuestran que las notificaciones automáticas (esos pequeños pings y notas que recibes para que entres a tus aplicaciones) crean hábito. Alinean un activador externo (el ping) con un activador interno (una sensación de aburrimiento, incertidumbre, inseguridad, etc.). Todas las aplicaciones las usan, pero algunas, como Musical.ly y YouTube, han descubierto que cuando las notificaciones nos dicen que hagamos algo, como "¡Mira el nuevo video de Sally!" o "¡Mira a quién le gustó tu publicación!" respondemos de inmediato. Estas llamadas a la acción no solo nos interrumpen, sino que causan estrés.

 

Qué hacer. Apágalas. La mayoría de los dispositivos tiene una sección de ajustes donde puedes desactivar las notificaciones. También deberías poder hacerlo en la configuración de la aplicación.

 

Los Snapstreaks de Snapchat

 

Un Snapstreak comienza después de que dos usuarios se envían instantáneas (imágenes) entre ellos durante tres días seguidos. Podrías pensar que lo que motiva los Snapstreaks es la competencia, pero lo más probable es que se deba a una teoría psicológica llamada "la regla de la reciprocidad". Los seres humanos tienen la necesidad de responder a una acción positiva con otra acción positiva. Así nace un Snapstreak. Los niños pueden obsesionarse tanto por mantener un snapstreak, que a veces le dan los datos de sus cuentas a otro amigo para que la siga cuando saben que no podrán entrar en la aplicación (lo que en realidad es un riesgo para la privacidad).

 

La regla también aplica con la devolución de los “me gusta”, que es cuando te gusta la publicación de alguien y le pides que le dé “me gusta” a tus publicaciones para aumentar tu número total de “me gusta”. Por supuesto, las empresas explotan la regla de la reciprocidad porque mientras más datos recogen, más oportunidades tienen de comprender a sus usuarios y tratar de venderles cosas.

 

Qué hacer. Ayuda a tus hijos a comprender cómo empresas como Snapchat están utilizando su deseo (positivo) de ser amables con sus amigos para que usen más su producto. Si los snapstreaksde tu hijo se están saliendo de control, haz que tu hijo envíe sus fotos solo una vez al día y después de sacar la basura, limpiar su habitación y terminar la tarea. Finalmente, si los snapstreaks de tus hijos son meramente molestos para ti y no son dañinos para ellos, es posible que debas esperar a que superen esta fase y que pasen a algo nuevo.

 

Las notificaciones sin horario fijo

 

Si supieras que Instagram actualiza tu feed o muro a las 3 p.m. todos los días, esa sería la hora a la que entras, ¿verdad? Pero eso no te mantendrá pegado a tu teléfono. En cambio, las compañías de redes sociales usan lo que se llama "recompensas variables". Esta técnica nos mantiene buscando infinitamente nuestro "premio". Por ejemplo, quién nos invitó, a quién le agradaron nuestras publicaciones y quién actualizó su estado. (No es coincidencia que también sea el método que usan las máquinas tragamonedas para mantener a la gente tirando de la palanca). Como nunca sabes lo que va a suceder, vuelves por más.

 

Qué hacer. Desactiva las notificaciones de la aplicación (por lo general se encuentran en los ajustes de tu teléfono, pero también en la configuración de las aplicaciones). Programa un temporizador para que se active a una hora fija todos los días para poder mirar tu feed.

 

Compras en la aplicación

 

Los juegos gratuitos como Clash of Clans y Candy Crush te atraen prometiendo emociones asequibles, y luego te ofrecen compras dentro la aplicación que te permiten subir de nivel, comprar monedas para usar en el juego, y más. Pero lo realmente manipulador es cómo las empresas te mantienen jugando y comprando. Mientras más uses el juego y más compras en la aplicación realices, más compañías sabrán de ti. Gracias a los juegos que se conectan a Facebook, también saben quiénes son tus amigos. Eso les permite presentar productos específicos para ti en el momento preciso en que es más probable que compres.

 

Qué hacer. Opta por la versión completa y paga de los juegos. Muchas veces terminan siendo más baratos, y más seguros, a largo plazo.