Ni en lujos ni en viajes… Si eres como la mayoría de tus americanos, la parte más importante de tu salario se va en tres gastos fijos. Aprende cómo reducirlos, a continuación.
3 gastos de peso
Al parecer, habría 3 ítems en los que los americanos gastarían el 70% de su salario: vivienda, transporte y comida, señala la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos. Y en ciudades como Nueva York y el resto del Noreste, este porcentaje sería aún mayor, de acuerdo con Business Insider.
Entonces, ¿quiere esto decir que todo está perdido? Nada de eso, sino que podría representar una oportunidad para ti. Si sabes que la gran mayoría de tus egresos se van por ese lado, podrías crear estrategias para reducir este impacto.
Vivienda
Un tercio de los americanos pagaría demasiado por su casa, según un reporte de este año de investigadores de la Universidad de Harvard. Para salirte de ese grupo, deberías pensar en el criterio de asequibilidad estándar, esto es, en que tu vivienda se lleve –como máximo- un 25% de tu ingreso (luego de descontar las tasas), se recomienda en Business Insider.
Podrías mudarte a una casa o apartamento más pequeño y que quede cerca de tu trabajo, para poder ir caminando. Con esto, estarías además recortando en transporte y en el consumo de servicios de tu hogar.
Transporte
Según la Oficina de Estadísticas Laborales, este sería el segundo gran gasto de los americanos. Para revertir esto, antes de elegir tu coche piensa si vale la pena gastar $500 dólares al mes por los próximos 6 años para obtener ese modelo que te gusta. Al comprar un vehículo, asegúrate de elegir uno que puedas pagar completamente en el momento, o cuyo préstamo puedas liquidar en no más de 3 años.
Comida
Este ítem representaría más del 40% del gasto de los americanos, pero puede reducirse significativamente (sin pasar hambre ni privaciones). Algunas acciones que puedes tomar son, según el sitio The Balance:
- No compres todo en la misma tienda. Aunque te ahorres tiempo, no ahorrarás dinero. Mejor, elige los descuentos de cada tienda.
- Si hay un producto en oferta, sin fecha próxima de caducidad y que sueles comer seguido, entonces sí, compra varias unidades.
- Compra según la estación. Infórmate sobre lo que crece en tu área y cuándo. A partir de eso, haz tu lista de frutas y vegetales.
- Usa todo lo que compres. Si ves un poco de esto y otro poco de aquello en el refrigerador, úsalo creativamente en un platillo.
- Llévate el almuerzo al trabajo.
- ¿Tú y tu familia suelen ceder a las tentaciones de comida chatarra? ¡Háganla ustedes mismos! Puedes preparar patatas fritas, hamburguesas, y dulces para comer en casa.
- Compra en la forma más económica. Por ejemplo, los frijoles disecados serían más baratos que los enlatados, una cabeza de lechuga sería más económica que embolsada, y la fruta congelada valdría menos que la fresca.
Ahora que tienes todas las estrategias a mano, llegó la hora de empezar a guardar esos billetes. Mientras tanto, checa el siguiente video para saber cómo ahorrar para tu retiro.
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