Lejos quedaron los tiempos en que las mujeres trabajadoras optaban entre su carrera y la maternidad. Con la modalidad de home office y las actividades freelance en auge, es cada vez más común tener un empleo y criar a un niño. Pero, contra las fantasías de “súper mamá” que muchas podrían soñar, la realidad suele acabar siendo un desafío.
¡No descartes aún la idea! Considera, primero, estas estrategias, si quieres trabajar en tu casa con tu bebé al lado.
1. Separa tu vida laboral y familiar
Para evitar interrupciones, y si tienes la posibilidad de hacerlo, delimita un espacio separado para tus actividades profesionales, ten un teléfono móvil laboral y no atiendas la línea doméstica en horas de trabajo, sugiere el sitio BabyCenter.
2. Acepta que trabajarás en intervalos (a veces, muy cortos)
Con un bebé en casa, no esperes simplemente sentarte frente a una computadora y trabajar varias horas de corrido. Es casi una necesidad aprender a cortar y a retomar las tareas rápidamente. Aprovecha sobre todo los momentos en que tu pequeño duerma o juegue tranquilo, para avanzar con aquellos pendientes que te demanden la mayor concentración.
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3. Prueba con un portabebés
Podrás, así, tener tus manos libres para trabajar y mantener al niño cerca, al mismo tiempo, aconseja el sitio Executive in Sweatpants.
4. Ten una to-do list
¡No dependas de tu memoria! Las interrupciones pueden desviarte de tus tareas y hacerte olvidar lo que estabas haciendo, advierte Ashley Torresala, en el blog The Work at Home Woman.
5. Planifica intervalos de trabajo, como lo harías en la oficina
Tu familia y las personas con las que trabajas sabrán qué esperar, y tú tendrás la mente más despejada. Si, en cambio, dejas que el día “fluya”, es probable que acabes siendo menos productiva y debas trabajar más horas, sostiene Ann Lawlor, en el blog mencionado.
6. Permítete admitir que no puedes con todo
Todos necesitamos ayuda. Antes de sentirte agobiada, pide que te asistan unas horas con el cuidado del bebé mientras trabajas, y asume que es posible dejar algunas tareas del hogar para más tarde, concluye Amanda Morin, en el blog Current Mom.
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