Tener arterias (vasos sanguíneos del corazón) saludables sería fundamental para una buena salud cardíaca y general. ¿De qué modo puede lograrse eso? Los tsimané, una comunidad indígena que vive en Bolivia, podrían tener la respuesta.
Arterias envidiables
Esa población tendría las arterias más saludables del mundo, según un estudio publicado en la revista científica The Lancet este mes. Su tasa de aterosclerosis coronaria sería cinco veces menor que en Estados Unidos, se indica desde el sitio del Colegio Americano de Cardiología (ACC, por sus siglas en inglés). Es que los tsimané gozarían del menor envejecimiento vascular de cualquier población que haya sido estudiada. ¡Impresionante!
Los investigadores estudiaron los corazones de aproximadamente 700 adultos de pueblos tsimané, de entre 40 y 95 años de edad. Así, descubrieron que el 85% no tendría riesgo de sufrir cardiopatía. El 13% tendría riesgo bajo y solo el 3% de moderado a alto.
"Estos hallazgos son muy significativos, explica Randall Thompson, quien presentó los resultados del estudio. "Las arterias de los tsimané son 25-30 años más jovenes que aquellas de los urbanitas sedentarios. Además, sus arterias están envejeciendo a una velocidad mucho más lenta", añadió. ¿Cuál es su secreto?
Alimentación y actividad física
"El estilo de vida de los tsimané muestra que una dieta baja en grasas saturadas y alta en carbohidratos no procesados ricos en fibra, junto con caza salvaje y pescado, no fumar y ser activo durante el día podría ayudar a prevenir el endurecimiento de las arterias del corazón", explica Hillard Kaplan, unos de los autores del estudio, en un comunicado.
Mientras que las poblaciones industriales serían sedentarias más de la mitad del tiempo que están despiertas, los tsimané solo estarían inactivos durante un 10% del día. Su estilo de vida involucra la caza, la pesca, la agricultura y la cosecha. Los hombres pasarían de seis a siete horas diarias físicamente activos y las mujeres de cuatro a seis.
En cuanto a su dieta, el 72% consistiría en carbohidratos, sobre todo no procesados y altos en fibra. Por ejemplo, consumen arroz, plátano, yuca, maíz, frutos secos y frutas. La proteína, por su parte, conformaría el 14% de la dieta y provendría de carne de animales. Solo el 14% de su alimentación consistiría en grasas.
Según se indica en el sitio del ACC, los autores del estudio sugieren adoptar los aspectos del estilo de vida tsimané mencionados a la vida cotidiana, en la medida de lo posible. De todos modos, consulta a tu médico antes de realizar cambios en tu dieta y rutina.
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