IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

El ataque cerebral afectaría cada vez más a los jóvenes, y menos a los mayores

El ataque cerebral le estaría dando un respiro a los adultos más grandes, pero crecería entre los jóvenes. ¡Entérate!

Contrario a lo que puede esperarse, el ataque cerebral estaría aumentando entre los adultos jóvenes, y se encontraría en descenso entre los mayores de 55 años. ¡Entérate más!

Buenas noticias para los adultos, ¿no tan buenas para los jóvenes?

En Estados Unidos, el ataque cerebral parece estar afectando en mayor medida que antes a la gente más joven, y mucho menos en los adultos más grandes, según un nuevo estudio publicado en la revista científica de la Asociación Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés).

“Las personas nacidas en la Generación Dorada (1945 a 1954), tenían tasas más bajas de ataque cerebral que aquellos nacidos 20 años antes, y también en los 20 años posteriores”, explicó el investigador y experto en Salud Pública, Joel Swerdel, en un comunicado de prensa publicado en HealthDay.

La metodología y los hallazgos

Los investigadores compararon las tasas de ataques cerebrales en personas de iguales edades entre generaciones, basándose en más de 225 mil registros de datos de este tipo de ataques entre 1995 y 2014.

Así, encontraron que las tasas se duplicaban en personas de entre 35 y 44 años, y que aumentaban en un 68% en aquellas de 45 a 54 años. Sin embargo, descendían en grupos de 55 y más años, comentó Swerdel.

El ataque, muchas veces, avisa

Para detectar un ataque cerebral, la Asociación de Ataque Cerebral de Estados Unidos (parte de la Asociación Americana del Corazón) recomienda estar en alerta si vemos en otra persona lo que sigue:

- Caída del rostro. Si un lado del rostro cae o se entumece, pídele a la persona que sonría. Y fíjate si la sonrisa queda despareja.

- Debilidad en el brazo. ¿Uno de los brazos está débil o entumecido? Pídele al otro que eleve ambos brazos. ¿Uno de los dos queda hacia abajo?

- Dificultad en el discurso. ¿Arrastra las palabras? ¿Le cuesta o no puede hablar o comprender? Pídele que repita una frase simple, como “El cielo es azul”. ¿La repite correctamente?

Si bien los anteriores son los más frecuentes, también debes prestar atención a estos cambios repentinos:

Entumecimiento de rostro, brazos, piernas, especialmente si se da en un sólo lado del cuerpo.

Confusión. Problemas al hablar o entender.

Problemas de visión. En uno o dos ojos.

Dificultad para caminar. Mareos, pérdida de equilibro o coordinación.

Dolores de cabeza. Sin causa conocida.

Si se da alguno o varios de estos signos repentinos, llama al 911 si estás en Estados Unidos, y lleva a la persona al hospital inmediatamente.

Prevenir se puede

Alterando algunos factores se podrían prevenir los ataques cerebrales. Por ejemplo, los que encontró un estudio publicado en The Lancet en julio de este año:

- Eliminar la hipertensión. La cantidad de ataques se reduciría entonces en un 48%.

- Hacer ejercicio. Si las personas hicieran más actividad física, podrían evitarse en más de un 36% de los casos.

- Mejorar la dieta. Este cambio ayudaría a evitar en un 19% de los ataques cerebrales.

- No fumar. Se desharía de un 12% más de casos.

Otros factores de riesgo responsables de estos ataques, serían también las afecciones cardíacas, la diabetes, el consumo de alcohol, el estrés y los lípidos.

Consulta con tu médico ante cualquier duda, o antes de hacer cambios significativos en tu estilo de vida. 

MIRA TAMBIÉN:

¿Quieres saber cómo prevenir un ataque cerebral? Esta dieta podría ayudarte

Estudio: 9 de cada 10 ataques cerebrales podrían evitarse, si se toman estas precauciones